Esta semana llegamos al final de nuestra miniserie de las vacaciones en van. El vehículo elegido ha sido la Tomatina de Advantura. En este tercer capítulo de la trilogía os hablaremos de nuestra ruta. Si aún no has leído los anteriores, en el capítulo 1 explicamos cómo preparamos el viaje y en el capítulo 2 os compartimos nuestros utensilios y hacks para hacer la vida más sostenible durante el viaje.
Julio ha llegado al fin pero el verano no y #juliosinplastico puede fácilmente transformarse en #agostosinplastico o #añosinplastico. Así que si tenéis vacaciones planeadas este verano quizás esta trilogía os pueda servir de inspiración para reducir vuestro impacto ambiental durante las vacaciones.
Con la pandemia y la transición progresiva a la tan hablada “nueva normalidad”, añoramos nuestro pasado. Sin embargo este pasado consumista y de producción desenfrenada nos ha traído aquí, a este año que parece salido de una película de ciencia ficción. Estamos ante una encrucijada donde podemos tomar decisiones de anclarnos al pasado y seguir consumiendo sin pensarlo con todo lo que nos siguen ofreciendo (mascarillas, guantes desechables, bolsas de plástico por todos lados como si éstas fueran a salvarnos de un virus), o por el otro lado arreglar el problema de raíz y construir un mundo más sano. Si algo bueno nos han traído los confinamientos globales es el demostrar que el consumo puede parar, las economías se reestructurarán y que en un corto espacio de tiempo, si le damos una oportunidad a la naturaleza, ella puede sanarse de nuestros daños. Pero si volvemos a la misma rutina de antes nos parece que estamos destinados a un proceso de autodestrucción. Así que a nosotros nos gustaría realmente entrar en una NUEVA REALIDAD, y creemos que el #futuroeszerowaste.
Nosotros viajábamos demasiado en avión y como buenos millenials seducidos por el concepto lowcost de viajes cortos a bajo precio caímos en una espiral desenfrenada. Tanto que en tan sólo el confinamiento perdimos 2 viajes (4 vuelos).
Así que para este verano de incertidumbre decidimos alquilar una van y explorar nuestros alrededores más cercanos en Cataluña. Para compensar sus emisiones (que son menores que las de un vuelo) usamos nuestros mejores hacks de zerowasters, que os compartimos en el segundo artículo de la miniserie.
Para finalizar la trilogía os dejamos con la ruta:
1. Garrotxa
a. Rupit i Pruit: pueblo medieval con un casco antiguo precioso y varias rutas de senderismo que salen de aquí. La primera noche la pasamos en una zona de bosque a unos kms del pueblo que encontramos con la app Park4night. En esta aplicación puedes encontrar zonas para pasar la noche en las categorías de campings, parkings (de pago o no, que lo especifica en la app) y bosque que han sido los de nuestra elección. Cenar en el bosque solos lo que nosotros cocinamos y despertarse en medio de esa belleza no tiene precio ni explicación.



b. Salt del Sellent (hicimos una ruta circular, subiendo por el camino que está marcado como camí de matxos y bajamos por las “escaleras”). Es una ruta preciosa por el bosque y el descenso por el curso del río. Al lado del estacionamiento hay un gorg (una pequeña cascada y estanque) donde de te puedes bañar al finalizar el camino.
c. Ruta circular de Sadernes a Sant Aniol d’Aguja. Ruta de senderismo más larga que la anterior (unas 5-6h), veréis, puentes de piedra, bosque y cascadas.
d. Castellfullit de la Roca. Este pueblo tiene la particularidad de estar asentado en un riscal basáltico, que tiene más de 50m de altura y casi 1km de longitud. Esta formación rocosa volcánica, surge de la superposición de dos coladas de lava, una con 217.000 años y la otra con unos 192.000 años de antigüedad. Desde el pueblo puedes bajar y cruzar un puente colgante donde tendrás unas increíbles vistas sobre Castellfullit.

2. Lago de Banyoles. Es el lago más grande de Cataluña, con una superficie de 1,18km2, y se le otorgó el título de espacio protegido por PEIN desde 1992. El agua del lago proviene de la Alta Garrotxa, filtrándose y distribuyendose por una serie de acuíferos subterráneos hasta llegar a él. Es un espacio de gran belleza natural y se pueden ver garzas y patos en toda la circunferencia del lago. Ideal para hacer un picnic y bañarse como fue nuestro caso.

3. Costa Brava
a. Calella de Palafrugell – Llafranc. Son dos pequeños y pintorescos pueblos colindantes, situados en el Baix Empordà. Nosotros la primera noche aparcamos en un estacionamiento en la parte norte de Calella con muchos pinos y muy cerca del centro. Una vez llegas a la playa es ideal hacer un tramo de camí de ronda a Llafranc (unos 15 min), y cenar en uno de los restaurantes en la orilla del mar con unas vistas preciosas del atardecer. Durante el día si tienes suerte y no hace tanto calor puedes hacer el camí de ronda en la dirección opuesta, hacia los jardines de Cap Roig (parada obligada: la cala el Golfet) y puedes seguir a alguna de las calas del Parque natural que queda entre los jardines y Palamós, nosotros caminamos hasta cala el Crit donde comimos nuestra deliciosa merienda preparada en la Tomatina esa mañana.
La segunda noche nos dormimos en un pinar que encontramos en Park4night a unos 10 min del calella de Palafrugell. Y al siguiente día disfrutamos en la playa de Calella que es también preciosa, llena de restaurantes con encanto en su orilla, nosotros comimos en la Blava.
b. Tossa de Mar. Este es uno de los pueblos más bonitos de la Costa Brava, con un precioso castillo, una pequeña calita al oeste del castillo y hermosas calas alrededor. Nuestras favoritas son cala Futadera y cala Giverola.
c. Blanes. Es la ciudad más al sur de la Costa Brava y un buen lugar para empezar o terminar tu recorrido. Se trata de una ciudad más grande y con más movimiento siendo menos pintoresca por esa razón pero igualmente tiene un casco antiguo bonito y desayunamos en un precioso café, Casa Oliveres, en una azotea viendo al mar. Para comer, regresando de las calas de alrededor encontramos un restaurante cuya comida y amabilidad del dueño son un deleite, Sesala. Nuestra playas favoritas por Blanes son cala de Sant Francesc, cala Treumal y cala S’Aguia.
Y aquí se acaban nuestras vacaciones y nuestra guía del viaje. Esperamos que os haya gustado y que pueda servir como inspiración para estas vacaciones de verano. Hasta el siguiente artículo.